Nunca pensé que iba a pasar lo que anoche pasó, pero viendo como estaban las cosas lo encuentro normal. Pensé que nunca diría lo que le dije ayer pero no se de donde saqué los cojones para decírselo, creo que porque estaba ya harta.
Hoy me he despertado a las 8:30 de la mañana por culpa de una enana monisima que es mi prima y estoy con mucho sueño y mala hostia acumulada. Así que encerraré a las hadas en una torre con las alas atadas para que no puedan huir, al cuento le arrancare las paginas y las quemare, y la portada la guardare con mis recuerdos para recordar los momentos buenos y sonreír, pero sobretodo para recordar los momentos malos y poderme olvidar del amor que siento por él.
Ya iré cicatrizando las heridas de muñeca rota.
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